A lo largo de la relación de pareja se atraviesan diferentes etapas y momentos vitales. Pueden aparecer problemas de comunicación, de intimidad, continuos conflictos, dificultades en el reparto de las tareas domésticas, discrepancias en la crianza de los hijos, dificultades con las familias de origen, problemas en las relaciones sexuales, infidelidades, distanciamiento, dificultades para compartir proyectos futuros y ruptura de la relación de pareja.

La intervención psicoterapéutica facilita un lugar de encuentro para la pareja, neutral y seguro, donde puedan aprender una nueva forma de comunicarse, de negociar y modificar aspectos de su dinámica relacional que les están generando conflicto. En las sesiones el terapeuta acompaña y facilita la expresión y reconocimiento de emociones mutuas. Se redefine el problema, se fomenta la comprensión de sus necesidades como personas y como pareja, se buscan alternativas y soluciones comunes, para establecer relaciones igualitarias, de intimidad, con reciprocidad de roles y cuidado mutuo.

Una de las alternativas que puede encontrar la pareja es la ruptura. Es una de las pérdidas importantes de la vida, un proceso muy intenso a nivel emocional, que tiene repercusiones familiares, sociales y económicas. La intervención psicoterapéutica está orientada a acompañarles en este proceso, facilitando la expresión de las emociones y miedos que van a surgir, ayudando a comprender e identificar todos los cambios, facilitando la comunicación entre la pareja, con sus hijos y sus familias de origen, ayudándoles a negociar y establecer acuerdos.

Desde la Terapia de Pareja se trabajan diferentes demandas:

• Problemas de comunicación entre la pareja.
• Problemas de negociación.
• Dificultades en las relaciones sexuales.
• Distanciamiento, dificultades para encontrar espacios comunes, proyectos de futuro.
• Problemas con las familias de origen de cada miembro de la pareja.
• Crisis vitales.